La ruta
Quiénes somos
La Ruta del Vino de la Mancha es una Asociación sin ánimo de lucro cuya finalidad es la promoción y el desarrollo del turismo vitivinícola en el ámbito territorial de la D.O. La Mancha; fomentando la organización de actividades económicas, recreativas, folclóricas, culturales, formativas, etc. que contribuyan a ello.
Actualmente la Ruta está formada por más de 70 socios: 11 municipios. Todos conectados por su paisaje singular: el mayor viñedo del mundo, una larga tradición vitivinícola y una cultura en la que pervive la esencia de El Quijote y Sancho. El resto son empresas que apuestan por la mejora continua y están convencidos que la cultura del vino es un argumento principal en la comercialización de nuestro territorio.
Trabajamos en colaboración con la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, las Diputaciones de Albacete y Ciudad Real y con ACEVIN. Desde el 2018 formamos parte del Club de Producto Rutas del Vino de España, respaldado por la Secretaría de Estado de Turismo, TURESPAÑA y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación
Formar parte de este apasionante proyecto es una oportunidad para promocionar tu Ayuntamiento o tu empresa y contribuir a la dinamización económica y social de la región.
Las empresas que pueden formar parte de esta iniciativa son bodegas, museos, alojamientos, restaurantes, tiendas especializadas, agencias de viaje y cualquier empresa que esté relacionada con el mundo del vino y el enoturismo.
Benefíciate de
Asóciate
Si tienes interés en participar en la Ruta del Vino de La Mancha, ponte en contacto con nosotros y resolveremos tu consulta.
Descubre qué ver en la Ruta del Vino de La Mancha y planifica tu escapada enoturística perfecta. Desde viñedos y bodegas hasta patrimonio cultural y natural, la Ruta del Vino ofrece turismo del vino en Castilla-La Mancha para todos los gustos y edades.
Desde Alcázar de San Juan hasta Tomelloso, pasando por localidades como Socuéllamos, El Toboso o Campo de Criptana, cada pueblo aporta algo único. Te invitamos a descubrir su patrimonio, sus fiestas, su arquitectura tradicional y, por supuesto, sus vinos.
Además del vino, la Ruta ofrece monumentos icónicos como los molinos de viento de Campo de Criptana, las lagunas de Pedro Muñoz, el patrimonio cervantino de El Toboso o los castillos y miradores desde los que contemplar la inmensidad del viñedo manchego.
Combina tu visita con experiencias gastronómicas, fiestas populares y tradiciones que dan vida a esta tierra. Explora sus bodegas, disfruta de la cocina local y participa en actividades que conectan cultura, vino y territorio.